08 agosto 2006

Haciendose la puta...



"... Me dijo que yo
mamaba muy bien y seguí mamando sin detenerme hasta que me dijo que parara, que no aguantaba más, que iba a botarse. Dejé de mamar y esperé a que respirara con calma, acostada junto a él. Me abrazó y me chupó las tetas, ambas, repetidas veces. Poco a poco se fue montando sobre mí hasta que lo tuve totalmente encima, me penetró con algo de brusquedad, aunque yo estaba bastante húmeda sentí un poquito de dolor por la fuerza con que lo hizo. Lo penetró todo, sentí su respiración agitada, cada vez más, cada vez que me penetraba fuerte y cada vez más rápido. Gemí todo el tiempo, me gustaba sentir a ese desconocido adentro y encima de mí. Después me hizo colocar en cuatro y me siguió penetrando, por la vagina. Me daba muy duro. Cada vez que podía me acariciaba las tetas que se movían sin control me acariciaba mis nalgas. Dejó de darme por la vagina y sentí que empujaba por mi ano. Eso no estaba en mis planes, pero no dije nada. Sentí que no entraba fácil. Él untó saliva en mi ano y lo penetró despacio. Entró todo, afortunada era yo que ya tenía experiencia anal y no era mi primera vez por allí. Me dio duro, cada vez más, no se cuanto tiempo lo hizo, yo estaba muy excitada y sentí dos orgasmos casi seguidos, y yo gemía del placer tan exquisito, de pronto me dijo que si le permitía eyacular en mis tetas. Le dije que si. Se levantó sobre la cama, me arrodillé, se quitó el condón, lo tiró al piso y lo ayudé a masturbarse con mis manos hasta que en un par de minutos eyaculó sobre mis tetas hasta la última gota."

leer más


visiten:
sexycuentos.com